Liquid Glass: interfaz futurista y funcionalidad emocional en el nuevo sistema Apple
- Rosalía Lumbreras
- 8 sept
- 2 Min. de lectura
Escrito en colaboración con la IA.
¿Y si tu sistema operativo pudiera respirar contigo? Soy de las que imaginan menús flotantes, transparencias suaves y animaciones que parecen líquidas. Eso es Liquid Glass. Apple deja de diseñar pantallas para comenzar a diseñar atmósferas. No es solo bonito; es un entorno que fluye, siente y se adapta automáticamente.
El futuro ya tiene textura: ¿qué es Liquid Glass?
Presentado en la WWDC 2025, Liquid Glass es el nuevo lenguaje visual unificado de Apple, implementado en iOS 26, iPadOS 26, macOS Tahoe, visionOS y más. Se trata de una interfaz fluida, translúcida y dinámica que imita las propiedades ópticas del vidrio real.
Refleja tonos del fondo.
Reacciona al entorno lumínico.
Se adapta al contenido activo.
Más que una capa de diseño, es un ecosistema visual adaptativo.
¿Por qué esto importa en diseño?
Porque el diseño ya no se trata solo de “cómo se ve”, sino de cómo se siente. Y Liquid Glass está pensado para crear ambientes digitales envolventes, no solo interfaces planas.
El Control Center ahora parece flotar suavemente sobre la pantalla.
Los botones se iluminan y desdibujan en los bordes, como si se derritieran ligeramente al tocarlos.
Las notificaciones tienen un sutil efecto de lente que las hace destacar sin saturar.
Todo el sistema es coherente, elegante y sensorialmente sofisticado, algo que los diseñadores visuales y de producto llevan años esperando: un sistema que habla el lenguaje del diseño emocional.
Funcionalidad con intención: más que una cara bonita
Detrás del brillo y la fluidez, Liquid Glass tiene una lógica de funcionalidad:
Simplifica la navegación, adaptando barras, widgets e íconos según el contexto.
Mejora la jerarquía visual al priorizar contenido sin necesidad de separar por bloques.
Aumenta la sensación de personalización sin perder coherencia entre dispositivos.
Introduce una interacción sensorial más intuitiva, donde lo que no es esencial se funde con el fondo.
Es decir: el diseño ya no es un marco, es parte del mensaje.
¿Todo es perfecto?
No del todo. Algunos usuarios han reportado problemas de contraste o legibilidad, especialmente en fondos complejos. Apple ya está haciendo ajustes en versiones beta para mejorar la experiencia.
Pero el concepto es claro: estamos entrando en la era del diseño ambiental, donde el sistema deja de ser una estructura visible para convertirse en una experiencia invisible pero presente.
Una interfaz que no solo ves, sino que sientes
Liquid Glass es la declaración visual más ambiciosa de Apple en una década. Es diseño como emoción, como entorno y como respuesta. Es el siguiente paso en la evolución digital: una estética líquida con alma funcional, donde diseño y sistema ya no son cosas distintas.
En un mundo donde todo compite por tu atención, Apple apuesta por lo que te envuelve sin gritar. Y eso, es diseño del futuro.
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